-Escrito hace un mes-
Confirmado: La cebra ha vuelto a ser unicornio.
…Bueno, ser unicornio es como muy valioso: Digamos que la
cebra ha vuelto a recuperar su cuerno. Ahora, es una yegua rayada con un cuerno
pegado con sintex.
La cebra esta mas cagada en las patas que un unicornio.
Ella no se sentía así, al contrario, planeaba un wild weekend en el que le
quitaría el cuerno a su unicornio de turno y se sentiría liberada de tanta
euforia, pero no. Jebus se metió en el medio. La yegua rayada asistió a un
congreso de unicornios en extinción en el que le hablaron sobre cuidar su
cuerno. La yegua se sintió muy puta y experimento la famosa “culpa” católica
que Jebus puso en su corazón. Si, loco. A la mierda con los que dicen que soy
atea. Si fuera atea, créeme que a esta hora no estaría un sábado a la noche en
pijama escribiendo esto como ñoña. Tampoco es que me trago un rosario, pero si
creo en Dios. Y a veces Dios me caga y me confunde, pero se que lo hace por mi
bien. ¡La cebra soy yo!
“Conservarse unicornio hasta el matrimonio” Okay. Ya la
cague. El guía dictador de charlas dijo que podíamos confesarnos y “enmendar”
la metida de pata, o “quitada de cuerno”. No jodamos. El cura no me va a dar un
himen nuevo. Lo hecho esta hecho y yo me sentía como una cebra con un cuerno
trucho, comprado en una feria persa. Una cebra sin su cuerno original. Una
cebra engañada y pecaminosa. Y aparte ya me confesé por eso, y el cura no me
paso ni un cinco de pelota. Me parece una pelotudez lo de la confesión, porque
Dios me esta viendo cuando me mando las cagadas que me mando y supongo que me
perdona, porque después llego a mi casa y le pido perdón. No se, no me voy a
meter con la religión, estamos hablando de otra cosa.
Ahora, la cebra no quiere ni entregar su cuerno trucho. Y
sabe que todos saben que es una cebra, pero no quiere hacerse mas cebra de lo
que ya es, y en parte piensa que nunca va a casarse, entonces ¿Para quién
guardarse? Y sobre todo ¿Por qué guardarse si el caballo con el que podría
casarse va a tener mas puestas que el sol? ¿ Y que caballo se casaría con esta
yegua rayada? Si, si…Ninguno, pero tampoco da andar haciéndote la loca con todo
el mundo.
¿Viste que neurótica soy? TODO EL MUNDO dije, ¡como si
treinta y dos vagos estuvieran esperándome en la puerta para tener sexo! De
pedo es uno, se supone que es unicornio ¡y no esta en la puerta!
Lo bueno de los hombres, como para encontrarles otro
beneficio, es que pueden decir que son vírgenes y nosotras les tenemos que
creer, porque no hay forma de probar lo contrario…Bueno, a veces si.
Yo se que la culpa esta tomada de la mano con mis
expectativas. Ay, Melisa, sabes que soñas que te pidan matrimonio metiendo un
anillo adentro de un libro, o algo asi…Aunque le digas que no al pibe, pero
sabes que lo deseas. Sabes que una de tus metas mas top es encontrarte con
“esa” persona que va a hacer la gran diferencia y no queres tenerla super
abierta cuando llegue la hora de hacerlo con el.
Hablemos con la verdad: Todas alguna vez hemos soñado con
el vestido blanco, aunque después digamos “no acepto” o salgamos corriendo como
Julia Roberts en “Novia fugitiva” (cosa que yo haría)
Digamos que quiero una propuesta, un vestido y un escape.
No creo en el matrimonio, pero mis ideas cambian mas que
el puto clima, por eso no se si mañana crea y no se que decisiones tomar hoy
por esa misma razón. ¿Y si mañana por fin aparece? ¿Eso es lo mas importante
que tengo para dar? ¿De verdad? Yo creo que lo mas importante que tengo para
ofrecer es mi corazón, no mi concha.
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