miércoles, 14 de noviembre de 2012

Para ser franca

¿Como decirte esto? ¿Como empezar? ¿Como ser sutil y avalanzadamente honesta?
¿Como convencerte de que no hablo con demencia, sino con la total sinceridad de lo que creo sentir?
¿Y como hacer que me entiendas?
He visto mas luz en un segundo de tus ojos que en los destellos radiantes de mis dos décadas por culminar.
Creo ser la única persona que venera tu sonrisa, puesto que, aunque reconozco sus imperfecciones frente a opiniones ajenas, yo se que es la mas preciosa del mundo.
Me culpo cada noche por no recordar tu voz y aun así adorarla y querer oírla al dormirme tanto como al despertar junto a una almohada que intenta reemplazarte...tan inútilmente.
No se si te busco o dejo que me encuentres, pero solo deseo verte, observarte, mirarte, examinarte, descubrirte hasta que pueda saber lo suficiente como para pensar que no vales la pena...o tal vez mereces la molestia de que me lance al vació sin saber si moriré o saldré invicta.
He intentado buscar la raíz de todo esto, de verdad que si, pero solo descubrí que al momento de conocerte perdí parte de lo que se llama razón y estoy tocando la locura con la punta de los dedos.
Comprendeme: No se que hacer.
Suponiendo que me notas, suponiendo que me atrapas vociferando esta apologia ilusa e inconcreta, dime:
¿Que harías tu? ¿Que responderías a esta confesión que se ha prolongado mas de lo que yo esperaba?
Es que tan poco te conozco, tan mal, de manera tan escasa que ni siquiera adivinaría tu reacción.
No quiero que creas que te imploro que me ames, de forma instantánea, como en un mundo ideal.
...Yo se que nada de eso existe.
No quiero que me pidas perdón por no sentir lo mismo y te sientas culpable por ser racional.
Tampoco quiero que te sientas mejor que yo, enaltecido porque alguien tan absurdo como la que escribe pudo comenzar a quererte.
Solo quiero que lo sepas. Así como que sepas que estoy ahí, siguiéndote los pasos.
Que, para ser franca, nací para pisarte las huellas, a donde quiera que vayan.
No me interesan tus fines conmigo, solo quiero que termines todas las historias que has querido comenzar sobre las paginas de mi piel, y que acabes cada uno de tus instantes suspirando sobre mi pecho.
¿Por que querría saber para que te sirvo y cual es mi función en tu vida? Si con el tiempo he aprendido a sentirme privilegiada por el minúsculo y gran hecho de saber que existes y que te encontré.
Y para ser franca, seré lo que me pidas que sea.
Si pudiera vislumbrarte bajo esta momentánea tormenta de diciembre, si tan solo el destino me regalara el placer de verte de nuevo antes de que el año llegue a su ocaso y escampe un nuevo sol en el cual lo poco que pudimos escribir sobre la arena hace doce meses, sea arrastrado por el océano  hasta perderse en el infinito de tu atlántico inconscientemente azul.
¡Porque explicarte esto es como querer introducir todo el mar adentro de un vaso!
Es tan inmenso que acabaras pro maldecir mis conclusiones nocturnas en insomnio.
Vas a odiarme, te lo prometo, pero conociendo a mi persona, puedo firmar sobre un papel que no vas a librarte de mi mirada callada cuando al fin nos encontremos de nuevo.

FIN.


2 comentarios:

  1. Cuanta sinceridad, rabia, amor, dolor, risas, y lágrimas. Un texto tan completo y con un vocabulario que me dejó de boca abierta. Este talento tuyo, es impresionante. No lo pierdas, segui escribiendo y leyendo y amando. Siempre amando.
    Que tu amor sean mares eternos e infinitos y que ningun vaso en ningun lugar logre contenerlos! Vuela bonita y crea terremotos en los corazones ajenos!

    ResponderEliminar