Click, perdiendo el control

Sabemos que la vida es perra, y por consecuente, tiene momentos perros.
Vos vas haciendo equilibrio en la cuerda del tiempo y transpasas dias, meses y hasta años en perfecto equilibrio. ¿No te pusiste a pensar que la cuerda puede tener nudos?

A ver, vamos a la teoria:  Esos nudos son CLICKS. Si, asi, CLICKS, como ese que haces con tu mouse.
Como ese click que tenes que hacer en GENIAL cuando termines de leer esta nota, o como ese click que podrias hacer en Facebook: Ruda y Cursi (mi foto) Gracias ;)
Basta de promocionarme.

Vuelvo: Hablaba de los clicks de la vida, de los clicks del amor, no tanto de los clicks literales.
Hacer click no es una boludez. Hacer click es algo jodido, algo que sabes que termina en alguna otra cagada muchisimo peor, o mejor en algunos casos.
Hacer click es comenzar a ver que tiene un lunar en cierta parte del cuerpo, o una marquita aqui y alla. Fijarte en los detalles, las cejas extrañas, el color exacto de pelo, el movimiento del caminar. La mirada.
Hacer click es pedirle que te mire a los ojos y que te guste como cambian de color con el paso de los dias. Es magico.
Hacer click es que te diga lo que queres escuchar, sin que le hayas dicho nada. Que te lea la mente. (Bueno, somos opuestos complementarios segun el zodiaco, asi que se supone que el debe saber lo que yo necesito y hasta ahora parece saberlo y muy bien)
¿Cuando haces click? Cuando sentis que algo cambio. Cuando se te escapa la sonrisa idiota.
Haces click cuando terminas de dar un beso y sabes que ya estas con la cabeza adentro de la soga. Cuando sos consciente de que estan por degollarte y te quedas ahi, en el molde. Y en vez de pedir que alguien te ayude, por poco pateas la silla para al fin ahorcarte y lograr esa paz que con el tiempo es una guerra.
¿Alguna vez hiciste click? ¿Alguna vez sentiste como todo cambiaba? ¿Como morias sin morir?
Haces click cuando te mordes el labio, cuando ya no lo podes mirar porque duele de ternura.
O cuando decis : "¿Que carajo estoy haciendo? ¡Yo no tengo que estar aca, Barba!" y cuando te entregas y decis: "Ya fue, me encanta"
Es que a las pelotudas como la que escribe, le encanta, le gusta  y se alimenta de ese parto interminable que es el amor, en cualquiera de sus fases. Del amor que tal vez ni es amor, pero parece y entonces jugamos a la enamorada otra vez. A mandar mensajes y contestarlos, a recrear posibles historietas, a ilusionarse con palabras de un casi perfecto desconocido al que ni se si ponerle nombre bloguero porque estoy tan decepcionada del mundo que ya ni se cuanto puede durar algo, y menos la gente...Y MUCHO MENOS LOS HOMBRES.
Ay, no, perdon, saben que? Que yo haya conocido a un seleccionado club de idiotas, no significa que todos los hombres lo sean. O eso espero y quiero creer.
En fin, creo haber hecho CLICK, como tantas otras veces, solo espero que esta vez, no salga todo como el culo. Por favor!
Una, loco, UNA!